“Si no estás dispuesto a aprender, nadie te puede ayudar. Pero si estás dispuesto a aprender, nadie te puede parar”. Este proverbio chino marcó significativamente la vida académica de Luis Eduardo Oseguera Andrade, quien orgullosamente logró graduarse de la secundaria gracias al apoyo de la Casa IBERO Segundo Montes, SJ.
Él, así como sus once compañeras y compañeros graduados de los niveles de primaria, secundaria y preparatoria, no tuvo la oportunidad de culminar sus estudios por factores como la edad o la falta de recursos. Ahora, gracias a la labor conjunta del EEA y la Casa IBERO, ningún factor volverá a ser un impedimento para ellas y ellos.
La Dra. María Guadalupe Chávez Ortiz, directora del Centro Intercultural de Reflexión y Acción Social (CIRAS) de la IBERO Puebla, se mostró orgullosa de este grupo de jóvenes y adultos autodidactas, conscientes y tenaces, que con su logro están “dignificando la vida de otros seres humanos”.
“Este es un evento que a nosotros como Casa IBERO y como IBERO Puebla nos hace sentir muy orgullosos, porque parece que ustedes 12 son un número pequeño, pero si lo vemos en prospectiva es un número muy grande”, ya que en México al menos 4 millones de niñas y niños no tienen acceso a la educación, según datos de UNICEF.
María de los Ángeles Bonilla Rivera, quien culminó el programa de preparatoria en línea, es consciente del impacto de este gran logro en un contexto pospandémico, por lo que llamó a sus compañeros a reconocer este logro como una forma de potenciar sus propias capacidades sin importar los obstáculos.
“Hoy cerramos este ciclo y tenemos la oportunidad de seguir realizándonos profesionalmente y evolucionar. Deseo para cada uno de nosotros, graduados, que sigamos luchando por cada una de nuestras metas y que nuestra edad no nos limite nunca” dijo.
Las y los graduados también fueron reconocidos por Mtra. María del Pilar Robles Villafán, directora del IEEA en Puebla, Zona Sur, quien aseveró que el lema de la Universidad Jesuita, La verdad nos hará libres, se unió con el lema de la Escuela para Adultos: Lo que importa está en la mente; ambos, dieron valiosas herramientas de conocimiento que van más allá de la educación en el aula: brindaron conocimientos para la vida.
La tutora de este grupo de mentes preparadas para seguir alcanzando sus sueños, es María del Rosario Juárez, responsable del programa de IEEA en la Casa IBERO. En sus palabras, su acompañamiento no solo fue educativo, sino también emocional al haber formado lazos que los acompañaran de por vida, y que les dieron aprendizajes más valiosos que los que suelen brindarse en la educación tradicional.
“Quiero agradecerles por permitirme cooperar con una pluma para esas alas que tienen, con las cuales van a llegar muy lejos, porque confían en ustedes, y yo confío en ustedes también”, expresó la tutora que se conmovió al escuchar los logros de sus estudiantes.