Más de 400 almas jóvenes, risueñas, esperanzadoras y emocionadas se congregaron en la IBERO Puebla para celebrar el culmen de toda una trayectoria de esfuerzos, vivencias y excelencia académica. “Hoy es tiempo de despedir una de las etapas más ricas de su desarrollo integral como personas, como futuros profesionistas u como ciudadanas y ciudadanos”.
Esas fueron las palabras con las que el Mtro. Mario Patrón Sánchez, Rector de la IBERO Puebla, agradeció a las graduadas y graduados IBERO Puebla, que hoy salen al mundo a dar fe del espíritu humano, de servicio y excelencia que caracteriza el modelo educativo de la Institución.
“Como cada cierre en la vida humana se abre ahora un nuevo ciclo que asoma lleno de posibilidades, desafíos, alegrías y una mayor plenitud”, y en todos esos momentos, su Casa de Estudios los acompañará. Las y los graduados de las Preparatorias IBERO Puebla y Tlaxcala, y los seis departamentos académicos de la Universidad, celebraron poder seguir de la mano de la Institución que los vio crecer.
Por supuesto, este logro “no se camina en solitario; las personas que nos acompañan son coautoras de nuestros logros, y es en el encuentro con ellas como crecemos integralmente y maduramos nuestro modo de proceder”, afirmó el Rector. La calidez, emotividad y cariño de los seres queridos fueron ingredientes importantes para esta ceremonia de graduación.
Integrantes de las Preparatorias IBERO Puebla y Tlaxcala pusieron en palabras las emociones de llegar al final de una etapa significativa; “y es que tomar conciencia de lo sucedido, agradecerlo y aprender de ello es esencial en la formación de personas conscientes, competentes y compasivas y comprometidas”, expresó la directora de la Preparatoria IBERO Puebla, la Mtra. Alejandra Alpuche Vélez.
La formación de mejores personas para el mundo se cultivó día con día a lo largo de la educación de cada joven. “Hoy, confiado en la labor diaria y comprometida de quienes colaboramos en las preparatorias, puedo decir: misión cumplida”, afirmó el Mtro. Erick Ramírez Medina, director de la Preparatoria IBERO Tlaxcala.
Estudiantes destacadas de ambas instituciones dieron fe de esa misión: “El día de hoy, al recibir nuestros diplomas, vemos nuestros sueños con más claridad que nunca”, dijo a su generación Dana Vázquez, graduada de la Preparatoria IBERO Tlaxcala; y añadió su congénere del plantel Puebla, Jimena López, que “es nuestro deber como adultos jóvenes cambiar el rumbo de la historia, […] preguntarnos cómo es que podemos llegar a la excelencia desde el amor por nuestro entorno”.
Este momento fue acompañado por una pausa reflexiva y amorosa en la ceremonia eucarística, donde el Mtro. Manuel Bernardino Solís Echeverría, SJ, les recordó a las y los jóvenes que “la esperanza se trabaja todos los días”, por ello, “tenemos esperanza en todos ustedes para transformar su vida y el mundo en que vivimos”. Igualmente, el Mtro. Arturo González González, SJ, deseó a las y los graduados recibir este momento con agradecimiento, amor y sabiduría.