
La Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) celebra una nueva etapa de vinculación con el Estudio de Ópera de Bellas Artes (EOBA) a través de una destacada coproducción artística que conjuga el talento, la formación profesional y calidad artística de sus estudiantes. Se trata de la obra El niño y los sortilegios, proyecto que pone en escena a estudiantes de los Equipos Representativos Culturales de Ópera UDLAP y Danza UDLAP junto a profesionales del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura.
En el marco de los 85 años de la fundación de la UDLAP y 55 años de su campus en Puebla, esta colaboración representa el inicio de una relación entre ambas instituciones, que se materializó con funciones de preestreno los días 7 y 9 de mayo, seguidas por cuatro funciones abiertas al público los días 28 y 29 de junio en el Teatro de las Artes del CENART en la Ciudad de México.
Por lo tanto, como parte del riguroso proceso creativo que se realiza previo a estas presentaciones, los integrantes de los Equipos Representativos de Ópera y Danza de la UDLAP trabajaron intensivamente durante tres semanas junto a Ignacio González Cano, director de escena, de iluminación y coreógrafo de la ópera El niño y los sortilegios, quien viajó hasta la Universidad de las Américas Puebla para realizar este primer acercamiento antes de que los artistas se trasladaran a la Ciudad de México para integrarse plenamente al montaje.
Al respecto, Ignacio González Cano destacó que esta coproducción “tiene su corazón en la UDLAP”. La puesta cuenta con siete estudiantes de Danza y dos estudiantes de Música de esta institución educativa, así como la colaboración de talentos como Cristóbal Meza Alonso y Zaira Israde Burrola en las asistencias de dirección y coreografía, respectivamente, “es un encuentro mágico entre lo académico y lo profesional”, afirmó.
Asimismo, el coreógrafo y director argentino, destacó que esta iniciativa busca abrir caminos hacia la profesionalización de los jóvenes artistas al brindarles una experiencia inmersiva junto a profesionales ya consolidados del medio operístico nacional. “Los estudiantes comparten escenario y montaje con artistas que forman parte de los elencos de la Ópera de Bellas Artes, por lo que esta colaboración apuesta por la excelencia y por alcanzar los más altos estándares del arte mexicano”.
La UDLAP es una institución educativa de alto nivel académico y artístico, por lo que “no es casual este vínculo”, apuntó González Cano: “el nivel formativo de la UDLAP permite que sus estudiantes dialoguen artísticamente de tú a tú con los profesionales de la escena nacional”. La obra El niño y los sortilegios, de Maurice Ravel, promete ser una experiencia inolvidable tanto para el público como para sus intérpretes, al representar el encuentro de dos instituciones comprometidas con la formación integral y la excelencia artística.