Redacción

¿Qué sabemos en realidad del amor? Del amor en la vida real, fuera de comedias románticas edulcoradas y novelas donde hay un príncipe azul y una princesa en apuros. Eso es lo que Nilda Chiaraviglio cuestiona en su libro La pareja no existe, en el que lleva a su público a reflexionar la forma en que aman, y si esta es una forma sana de relacionarse

La escritora y psicoterapeuta llevó esta misma reflexión a la IBERO Puebla, donde presentó su libro ante un aforo amplio y en compañía de la Mtra. Adriana Duarte Romero, coordinadora de la Licenciatura en Psicología de la Universidad, quien a manera de bienvenida esclareció la temática principal de la obra: los mitos del amor romántico.

“Vamos hacia el amor como capacidad humana en desarrollo, como relaciones de libertades individuales en crecimiento. Esa es la propuesta que nos hace Nilda, y además nos va acompañando en el proceso de construir este amor”, comentó la Mtra. Duarte. Resaltó también la necesidad de autoconocimiento que plantea Chiaraviglio para poder saber lo que queremos y despojarnos de prejuicios.

Amar fuera de las estructuras

Nilda Chiaraviglio establece una relación necesaria para la discusión del amor con el pensisentir y el sentipensar, que son herramientas de autoconocimiento y expresión sana de las emociones que se deben integrar en las relaciones sociales, independientemente de si son amorosas o no. Limitar el discurso amoroso a un “yo soy”, coarta la libre expresión del ser y su evolución.

Así pues, las personas deben saber cómo aman, y desde dónde viven ese amor. De no hacerlo, se caen en narrativas de pertenencia sobre la otra parte de la relación llegando incluso a expresiones violentas, en las que el sufrimiento se vincula con el amor y no existe una consciencia de lo que podemos y no podemos dar a otras personas.

Por esa razón, Nilda Chiaraviglio afirma que la pareja no existe, en realidad existe la manera en que una persona se vincula con otra, y cómo ambas se afectan entre sí. Las claves para que esta incidencia sea próspera y sana recaen en el respeto al otro, en sus proyectos personales, en su historia y su calidad de vida.

Aunque la propia escritora afirmó que, si bien esto no es una fórmula concisa que puede aplicarse en cada relación de forma particular, estas claves no sólo son para eso, sino para un desarrollo personal más saludable, amigable y ético, que luego abrirá paso a relaciones interpersonales más fuertes.

“Debemos estar siempre en una balanza entre lo que le aporta mi vida a tu presencia, y lo que disminuye a mi vida. Mi presencia es una balanza que cambia todos los días y por eso es que tenemos que elegir todos los días con quién compartimos nuestra vida”, afirmó la escritora. Añadió que forma parte del proceso de amar fuera de las estructuras.