Con respecto a las expectativas económicas que se esperan para los próximos meses, la coyuntura actual está más clara en términos del proceso electoral que se avecina, lo cual brinda cierta certidumbre sobre el rumbo que tomarán los temas económicos.
Con respecto a la parte de exportaciones, importaciones, balance comercial e inversión extranjera directa y a pesar de algunos aspectos negativos que han afectado a diversos sectores productivos y al gobierno en general, el país ha logrado mantenerse con buenos resultados, refirió Juan Carlos Botello Osorio, profesor de la Facultad de Comercio y Estrategia Internacional de la UPAEP.
En particular, mencionó que el cierre del año pasado fue positivo, con un volumen de exportaciones cercano a los siete mil millones de dólares, lo que evidencia la recuperación económica en este aspecto.
Resaltó que, a partir del año 2020, el sector exportador se ha ido recuperando y muestra un crecimiento sostenido. Para el segundo semestre del 2023, el Dr. Botello estimó que se cerrará con un volumen de exportaciones aproximado de entre 620 y 630 mil millones de dólares, lo cual representa una sólida recuperación y cifras de crecimiento de dos dígitos.
El Dr. Botello también hizo hincapié en que, aunque hubo un déficit comercial el año pasado, lo cual significa que las importaciones superaron a las exportaciones, la economía mexicana sigue mostrando signos saludables de actividad productiva. Destacó que este déficit comercial refleja una mayor actividad productiva y una demanda de insumos provenientes del extranjero, lo cual impulsa la producción nacional y contribuye al desarrollo económico del país.
En cuanto a la inversión extranjera directa, el Dr. Botello señaló que este rubro ha sido afectado por aspectos como la inseguridad y la corrupción en el pasado. Analizando los períodos gubernamentales anteriores, mencionó que hubo descensos en la captación de inversión extranjera directa debido a estos factores. Sin embargo, resaltó la importancia de mantener un ambiente de confianza para el sector empresarial, especialmente en el contexto de los procesos electorales.
Señaló que se ha registrado una disminución en la captación de flujos de capital e inversión extranjera directa desde el gobierno anterior al actual.
Durante el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, se captaron alrededor de seis mil millones de dólares en inversión extranjera directa. Sin embargo, esta cifra mostró una caída significativa, con una disminución del 27% durante el gobierno de Felipe Calderón y un 16.09% durante el gobierno de Peña Nieto.
Bajo la administración actual del presidente López Obrador, la captación de inversión extranjera directa acumulada hasta el corte del 2023 es de aproximadamente 53 mil millones de dólares, lo que representa una caída del 5% en comparación con las cifras anteriores. Según el Dr. Botello, esto se debe a la persistencia de problemas de inseguridad y corrupción, que siguen afectando la captación de inversión extranjera.
La disminución en la captación de inversión extranjera tiene un impacto indirecto en las exportaciones e importaciones del país. Si los flujos de inversión fueran más altos, es probable que las exportaciones e importaciones hubieran superado las cifras actuales. El Dr. Botello menciona que la inseguridad y la corrupción continúan siendo factores negativos para la captación de inversión extranjera.
En cuanto a las expectativas para el futuro, destaca la importancia del “Nearshoring” como una oportunidad para el país. Señala que se han implementado importaciones de bienes de capital, lo cual ha generado un déficit en la balanza comercial. Sin embargo, considera que esto puede ser un detonador positivo si se controlan diversos aspectos internos del país, como la seguridad y el proceso electoral.
El Dr. Botello también menciona la ruptura de las cadenas de producción, distribución y proveeduría, así como la estrategia de Estados Unidos en contra de la economía china. Destaca que México puede aprovechar esta situación en el corto plazo para atraer nuevos capitales y explotar la región de Norteamérica. Sin embargo, subraya la necesidad de políticas públicas y de mejorar las condiciones internas del país para proyectar una imagen positiva.
Por su parte, Anselmo Salvador Chávez Capó, profesor de la Licenciatura en Administración Financiera y Bursátil de la UPAEP, comentó que se espera un crecimiento aproximado del 3% al 3.2% en ese período. El crecimiento económico se basará en dos sectores clave: la manufactura y los servicios.
Sin embargo, el Dr. Chávez Capó destaca una debilidad estructural en el sector primario, que necesita ser abordada para evitar la escasez de bienes y servicios. También menciona la inflación como un factor importante a considerar. Al comparar la inflación entre Estados Unidos y México, señala que la inflación en Estados Unidos fue del 4%, mientras que en México alcanzó el 5.18%. Esta diferencia se debe a la política monetaria implementada por el Banco de México para restringir el crédito y aumentar las tasas de referencia.
Explicó que la disminución de la inflación en México se logró mediante el incremento de las tasas de referencia, lo cual permitió una mayor capacidad de compra. En Estados Unidos, las tasas de referencia se mantuvieron en niveles bajos, lo que contribuyó a un crecimiento similar. Sin embargo, advierte que se debe tener cuidado con las importaciones y el consumo de bienes, ya que podrían afectar la economía.
Anselmo Chávez mencionó tres elementos importantes a considerar en relación con la inflación. En primer lugar, destaca que la inflación subyacente sigue siendo alta, con niveles superiores al 7%. Esto indica que los precios de los bienes aún no han disminuido. Además, señala que una vez que los precios suben, tienden a mantenerse altos, lo que afecta la capacidad de compra de las personas.
El objetivo del Banco de México es lograr una inflación del 3% más o menos uno por ciento. Según el Dr. Chávez, es probable que la inflación cierre el año en torno al 5% y busque alcanzar el 4% en 2024.
En cuanto al tipo de cambio, menciona que las remesas han experimentado una disminución de valor debido a la depreciación de la moneda local. Esto ha llevado a una pérdida de aproximadamente 1,250 pesos por cada remesa recibida. El tipo de cambio es un factor importante para la economía, pero es necesario considerar que un tipo de cambio bajo no es beneficioso para todos los sectores.